El Gobierno inscribe para los microcréditos y becas en un local partidario del Frente K Fuerza San Luis

Los denominados “microcréditos” “créditos” y becas del Plan Empezar son herramientas del Gobierno de Alberto Rodríguez Saá para seducir al electorado y conseguir votos para las elecciones del 14 de noviembre.

Desde el 27 de septiembre estos bonos son usados por el Gobierno como un llamador de ciudadanos que tienen distintos tipos de necesidades. Los citan a distintos lugares como locaciones partidarias donde entran en contacto con funcionarios y candidatos del Frente Fuerza San Luis.

El Chorrillero ya informó que en Potrero de los Funes en un merendero y sede K, una candidata entregaba la Tarjeta Alimentar y en los últimos días que en el Barrio Jardín del Sur se convocó a la gente a un salón con cartelería electoral del gobernador.

Ayer este medio registró otro caso que se difunde en esta nota.

Las instalaciones del Club San Lorenzo, en Riobamba Nº 877 de la ciudad de San Luis, en los últimos tiempos se convirtieron en una sede partidaria.

La primera bienvenida es una foto que muestra a Alberto Rodríguez Saá y a María José Zanglá (que encabeza la lista Fuerza San Luis como candidata a diputada Nacional), juntos y sonrientes. Está pegada en la puerta principal del salón donde a lo largo de este martes el Gobierno inscribió para créditos blandos y el programa empezar.

Nadie podría negar que allí se desarrolla alguna actividad proselitista, y la cara del gobernador se advierte desde la calle. Adentro, inclusive, luce la bandera del Frente K y el número que identifica a ese circuito: el 1016. En todas las paredes hay un afiche que promociona la candidatura de la presidenta del Comité de Crisis. Ahora en la fotos ya no aparecen los dos otros dos candidatos, Eduardo Mones Ruiz y Natalia Zabala Chacur.

El histórico Club San Lorenzo está ubicado sobre Riobamba entre Ciudad del Rosario y Caídos en Malvinas, a pocos metros del la Jefatura Central de Policía. Allí funciona la Filial San Lorenzo del Puente Blanco “Porosa” Lorenzo Sosa – San Luis. Por las redes sociales la institución comunicó el reciente campeonato que obtuvo el equipo de fútbol senior. Publicó imágenes de la celebración y la premiación, pero también de un almuerzo que compartieron los jugadores en un salón empapelado con la cara del gobernador y su partido.

El equipo no tiene participación en los torneos de la Liga Sanluiseña de Fútbol. “Muy feliz de volver a ver a nuestro club con las puertas abiertas y lleno de gente que quiere de verdad a nuestra institución”, escribieron este fin de semana después de obtener la copa de plata de la Liga Nacional de Clubes Seniors. La final la jugó ante Huracán, en la cancha de Defensores del Oeste.

Este martes pasadas las 17, en el ingreso se juntaron los que iban a anotarse para el Programa Empezar y los créditos blandos, y quienes hacían fila para retirar alimentos. Allí, además de las actividades deportivas que se sumaron en el último tiempo, también funciona un merendero 22AG. Se habían difundido dos horarios de inscripción: de 17 a 19 para el primero y de 12 a 18 para el segundo.

Por la otra puerta que da al playón cerrado y con baldosas rojas repartieron la merienda a las familias: galletitas, mate cocido y leche para pasar la semana. “Tenía un plan social pero me desafectaron, no tengo ingresos y por eso no puedo acceder a ningún crédito”, contó Guillermo, quien asistió con su esposa y sus dos hijos.

“Ahora vengo por la merienda. Ya me inscribí para un microcrédito y poder instalar una gomería. Ojalá que pueda darse, me dijeron que había muchas posibilidades. Estoy desocupado y solo hago changas, hasta de jardinería, de lo que sea me las voy ingeniando”, dijo por su parte Pablo.

Entre los que fueron con necesidades había un grupo de jóvenes. Dos de ellos contaron que se habían enterado de la convocatoria por “amigos que trabajan en eso”. Lo que tenían en mente es ampliar el proyecto de una barbería. “Tenemos que presentar el proyecto, y nos dijeron que hay tiempo hasta el viernes”, expuso uno al ser consultado.

El Chorrillero intentó hablar con las tres responsables que tomaban los datos a lo largo del salón pero no hicieron declaraciones. “No soy la encargada, pero no podemos”, se limitó a decir una de ellas. “Por la otra puerta las va atender Mónica”, alertaron después, pero nadie más salió para responder las consultas.